EL TIEMPO PASA
No, no es frase de la canción, aunque sería interesante saber la proporción de juveniles que ignorar el tema al cual se refiere tal frase como sea el asunto es que mientras uno se mantiene activo en el hospital o centro de salud, no es un sujeto extraño para quienes ocupan regularmente el recinto, léase médicos, alumnos de pregrado, internos, becarios de 1°, 2° o 3° año, enfermeras, auxiliares y, por cierto, el personal administrativo.
Pero, como todo llega a su término, al igual que las imágenes de filmes, que según programa se difuminan, uno también se va al negro, quedando solo algunos residuos.
Es en momentos de tal naturaleza, cuándo se destacan con fuerza algunos pensamientos no precisamente agradables. Un buen ejemplo sería el hecho que, aparentemente, el interés por aprender de los grupos más jóvenes, no precisamente por cumplir con una imposición, sino por la belleza del conocimiento en sí misma, ha decaído… total es cuestión de ver internet… y googlear el tema cuando la necesidad apremia, no importando gran cosa el olvido subsecuente.
El tratar de enseñar lo mejor posible, imperativo del médico docente y promesa de todos los facultativos desde que son titulados y juramentados como corresponde, es una actividad noble y bella. Aquel que la practica espera que sus educandos actúen en consecuencia con lo aprendido y si lo sienten posible y necesario, consideren incrementar el conocimiento por medio del estudio sistemático y la investigación toda vez que la crean factible realizar. Desafortunadamente no es raro encontrar aquellos que valorando mucho lo que resultaría del esfuerzo, no están dispuestos a iniciar tal emprendimiento. Otros, simplemente no están interesados en el asunto más allá de cumplir con una exigencia de programa y suelen manifestar que su interés está centrado en otra rama del conocimiento, por ejemplo la administración, ya desde el comienzo de sus estudios de postgrado. Tal conducta parece ser resabio, en algunos casos, de un sentimiento que se arrastraría desde su educación secundaria donde suele aparecer el pensamiento… y para que me enseñan estas cosas si no tienen nada que ver con lo que pienso hacer después…
Como en los programas de especialización médica está incluido el requisito de adquirir conocimientos sobre metodología de la investigación, no pocos, siguiendo la ley del menor esfuerzo, consideran que este último no parece justificado considerando que un aporte mínimo mas el apoyo de un buen número de softwares les pueden resolver sus eventuales tropiezos. Profundo error.
El desinterés por adquirir las mencionadas destrezas ha conducido a muchos postulantes a grados académicos, como por ejemplo de magister, a no poder completar su programa y a quedar en una especie de limbo que parece no causar inquietud al punto de presentar al personaje como… candidato a magister en… aun años después de lo que correspondería, lo cual es en definitiva, deprimente de presenciar.
Dr. Gaston Duffau T.
Profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile |
